«No nos rindamos!»
Desde el año pasado, la Escuela de Hostelería Las Gravileas ha tenido que adaptar sus métodos de enseñanza -ahora compagina la formación online con grupos más reducidos en la escuela- y garantizar la adquisición de habilidades prácticas, que son el núcleo del aprendizaje. Nuestro socio ha desarrollado incluso nuevos módulos de formación para satisfacer las diferentes necesidades de los beneficiarios.
Reconocida por la calidad de su formación técnica, Las Gravileas se ha ido convirtiendo en un centro de referencia en la región de Antigua. Los cursos de diploma que se ofrecen son variados y atraen a muchas mujeres: hostelería, cocina, pastelería, corte y confección, diseño floral, etc. Esta escuela de hostelería proporciona a las mujeres con pocos ingresos una formación integral, profesional, empresarial y humana. Proporciona a cada uno de sus beneficiarios conocimientos técnicos con el fin de aumentar sus ingresos para mejorar su nivel de vida y, con el tiempo, crear su propio negocio, fuente de empleo para otros. A través de esta formación integral, pretendemos lograr el desarrollo económico y social no sólo de los estudiantes, sino también de sus familias y comunidades en general.
La llegada de la pandemia Covid-19 y las restricciones sanitarias obligaron a nuestro socio a reorganizar y adaptar su oferta de formación y sus metodologías de enseñanza. Desde julio de 2020, la escuela ha continuado con los distintos cursos online y, aunque estos tienen un aspecto muy práctico, los alumnos han podido continuar su aprendizaje. Las Gravileas incluso sigue desarrollando cursos cortos sobre temas más específicos como la gastronomía prehispánica, por ejemplo, que mantiene viva la identidad y la cultura guatemalteca.
Desde 2017, ACTEC apoya al centro de Las Gravileas para reforzar sus vínculos con el mercado laboral local a través de un aprendizaje muy práctico y de prácticas en empresas locales. En los últimos 5 años, no menos de 5.000 mujeres han recibido formación en la escuela y han adquirido habilidades sostenibles. Desde el año pasado, los beneficiarios no han podido realizar prácticas debido al contexto sanitario, pero la dirección mantiene contactos regulares con sus numerosos establecimientos asociados y espera que se reabra el sector de la restauración. A pesar de este difícil contexto, el centro se mantiene firme para seguir formando a muchas mujeres en un oficio y hace unas semanas publicó en su página web el siguiente requerimiento para mantener el rumbo: “¡No nos rindamos!